Preparación: Preparación del Relleno: En una sartén, calienta una cucharada de aceite de oliva. Saltea la cebolla y el ajo hasta que estén tiernos. Agrega los champiñones y cocina hasta que se evapore el líquido. Añade las espinacas y cocina hasta que se marchiten. Retira la mezcla del fuego y deja enfriar. En un tazón, mezcla la mezcla de espinacas y champiñones con el queso ricotta y el queso mozzarella. Sazona con sal y pimienta al gusto. Preparación de las Pechugas: Precalienta el horno a 190°C (375°F). Corta las pechugas de pollo horizontalmente para crear un bolsillo sin dividirlas completamente. Rellena cada pechuga con la mezcla de espinacas y champiñones. Sazona las pechugas con sal y pimienta al gusto. Cocción de las Pechugas: En una sartén grande apta para horno, calienta una cucharada de aceite de oliva. Sella las pechugas de pollo en la sartén hasta que estén doradas por ambos lados. Transfiere la sartén al horno precalentado y cocina por unos 20-25 minutos o hasta que el pollo esté completamente cocido. Preparación de la Salsa: En la misma sartén utilizada para cocinar el pollo, agrega la mantequilla y la harina. Cocina por unos minutos para hacer un roux. Vierte lentamente el caldo de pollo y el vino blanco (si se usa), revolviendo constantemente para evitar grumos. Cocina la salsa hasta que espese. Ajusta la sazón con sal y pimienta al gusto. Servir: Sirve las pechugas rellenas de espinacas y champiñones con la salsa por encima. Acompaña con tus guarniciones favoritas. ¡Listo! Ahora tienes una deliciosa pechuga de pollo rellena con espinacas y champiñones, ¡perfecta para una comida elegante y sabrosa!
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